Con motivo de la celebración de la fiesta de la Inmaculada Concepción, las HICM acercamos -a través de una catequesis- la figura de María al grupo de jóvenes de la Parroquia del Pilar de Tenerife.
Comenzamos escuchando quién es María para cada uno y a continuación se les presentó a nuestra Madre como una mujer de «ojos abiertos, corazón sensible y mano pronta».
Repartidos en tres grupos fueron profundizando en cada una de estas actitudes por medio de tres talleres. El primero, ojos abiertos, se desarrolló en torno a la pregunta: ¿cómo descubre María su VOCACIÓN de ser Madre de Dios?; el segundo, corazón sensible, acercó a los jóvenes a María como Madre de todos; y, por último, mano pronta, en el que a través de la lectura de las bodas de Caná vieron cómo María sigue pendiente de nuestras faltas de vino y nos indica quién es el que da el vino bueno.
Para terminar, nos adentramos en el Corazón de María para descubrir cuál es su secreto… y es que en él -refugio en el que lo guarda todo- se encuentra el mismo Señor. Es por ello que estamos en el Corazón de María y eso nos basta.