¡Verdaderamente ha resucitado el Señor! Esta verdad es lo que hemos ido experimentando “en lo escondido” de estos días del triduo Pascual. Este ha sido el lema que ha guiado la experiencia de la pascua on line que se ha convocado en Familia Claretiana por el Equipo de PJV_Spain de la Provincia de Fátima de nuestros hermanos Claretianos. Más de cuarenta personas nos hemos conectado en las mañanas del Jueves, Viernes y Sábado Santo para tratar de abrir nuestro corazón al Misterio del Amor más grande y vivir esta Pascua en lo escondido, donde habita la Trinidad Santa y desde la que queremos vivir toda nuestra vida.
El Jueves Santo se daban mensajes claves del Cenáculo y de Getsemaní “Quien pasa por el Cenáculo, aprende a vivir en cristiano; quien pasa por Getsemaní, aprende a vivir como Cristo”
El Viernes Santo se invitaba a vivir la Pasión de Jesús desde lo escondido, yendo más allá de cada acontecimiento que celebramos este día de silencio y sobrecogimiento. Es la hora de vivir apasionados como Jesús, de hacer nuestra la Pasión de Jesús por el Reino y por la Voluntad de su Padre, y entregarnos a ella, cueste lo que cueste… y contemplar, desde lo escondido, a Jesús crucificado, porque la Cruz vacía no salva, salva el Amor apasionado de Jesús que llega hasta el final.
El Sábado Santo se invitaba a preparar el corazón para dejar a Dios actuar con la creatividad y la potencia que solo el Amor resucitado puede hacerlo. En vela, con nuestras lámparas encendidas, esperamos con María la acción de Dios con la certeza de que el Amor es más fuerte, el Amor es más grande y le pedimos que resucite nuestra vida.
En cada conexión, que animamos miembros de la Familia Claretiana, se tenía un tiempo para compartir por grupos pequeños. ¡Que regalo es siempre compartir con otros! En las salas nos veíamos gente conocida, personas con la que era la primera vez que hablábamos… y no deja nunca de sorprenderme cuando la primera conversación que tengo con alguien es sobre nuestra fe, nuestras experiencias más profundas.
Terminada la conexión se ofrecía un documento para la oración personal ‘en lo escondido’ (cf. Mt 6), que pretendía ayudarnos a abrir nuestro corazón y nuestra vida a la experiencia gozosa de la Pascua de Jesús.
Es verdad que estamos deseando volver a encontrarnos entre nosotros, a vivir las experiencias de Pascuas Misioneras y Contemplativas compartidas con otros, pero solo podemos dar gracias a Dios porque sigue apostando por nosotros, porque VIVE en medio de cualquier circunstancia… y el Espíritu, que es siempre creativo para Amar, nos ha tocado la vida y nos llama a gritar fuerte ¡EL AMOR VIVE! ¡VERDADERAMENTE JESÚS HA RESUCITADO!